Emprender en pareja implica sueños en común, comunicarse de manera efectiva y juntar las manos frente a la adversidad. Irianny Abreu y Andrey Rodríguez lo saben. Ambos abrieron Halo Studio, su propio spa, y más recientemente Halo Store Chile, su propia tienda de insumos.
Su historia es potente. Irianny, de 30 años aprendió a hacer uñas en Maracaibo. Andrey, administrador, empezó en un Subway y terminó al frente de una botillería.
En 2014, recién casados, migraron a Panamá. Allá Abreu se graduó como Técnico Superior en Administración y trabajó como asistente de un doctor. También hizo sus primeros trabajos de uñas. Sin embargo, la experiencia fue dura.
A dos meses de llegar a Andrey lo metieron preso por trabajar sin papeles y no tenían 1500 dólares para el pago de la multa. Además, se metieron en su casa y los amarraron para robarlos.
En 2018, luego de muchos sacrificios, se vinieron a Chile.
Irianny estaba embarazada de su primer hijo, con 8 meses. Cinco meses después de dar a luz empezó a trabajar en un spa y luego a domicilio.
No paré hasta que abrí mi propio local con una amiga”, pero tuvo que dejarlo por el nacimiento de su segundo hijo y hasta hace poco atendía a las clientas en su casa.
Hoy Andrey hace Uber luego que los dueños de la botillería vendieran el negocio. En noviembre pasado abrieron su tienda de insumos y ahora Irianny no solo ofrece servicios de manicura rusa y nivelación, pedicura, depilación y lifting de pestañas, también surte a emprendedores del rubro e imparte cursos. Con unión y sacrificio, así lograron su casa propia en Venezuela. Y aseguran que van por más. ¡Felicitaciones!
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